Hay una realidad incómoda, pero no por eso menos cierta: las mujeres empresarias en América Latina y el Caribe siguen enfrentando mayores desafíos que sus pares hombres por su género.

Esta desigualdad tiene impactos específicos para las mujeres que lideran sus propios negocios, entre ellos las limitaciones para acceder a financiamiento. La informalidad en que subsisten la mayoría de los negocios creados por ellas y su falta de historial crediticio también las hace menos atractivas para instituciones financiadoras como los bancos comerciales.

Otra traba que las mujeres enfrentan para conseguir capital está relacionada con las valoraciones sociales y culturales que hay sobre ellas. Se trata del sesgo de género, como se le llama a la inclinación -consciente o no- hacia una persona o grupo basado en si es hombre o mujer, y que nace de ciertas normas sociales y culturales que asignan ciertos roles a cada uno.

En el ámbito de las oportunidades crediticias, este sesgo se traduce en una menor probabilidad de aprobación de préstamos, menores sumas otorgadas, peores condiciones crediticias y hasta la posibilidad de que sus solicitudes sean rechazadas, tal cual indica BID Invest. Una investigación de ProMujer, el FAIR Center, Zona Shero y el Tecnológico de Monterrey señala que el 73% de las pequeñas y medianas empresas (PyMES) lideradas por mujeres no logran obtener los recursos económicos suficientes para impulsar el crecimiento de sus negocios o están excluidas por completo de las instituciones financieras.

Aunque esta realidad es innegable, también es cierto que las cosas han empezado a cambiar en la región y existen diversos esfuerzos por ofrecer soluciones financieras a mujeres empresarias, así como una mayor disposición de ellas para buscar recursos para crecer sus negocios.

Si eres una de esas mujeres, en este artículo queremos compartirte aspectos a tener en cuenta antes y durante tu proceso de búsqueda de financiamiento, así como opciones dirigidas a empresarias como tú. 

Si bien existen múltiples opciones, elegir la mejor para tu negocio dependerá de conocer cuáles son y qué ofrece y busca cada una de ellas. Durante tu búsqueda ten presente cuál es el objetivo para el que requieres los recursos, el momento de evolución en que se encuentra tu compañía y los recursos de los que dispones.

Las opciones más comunes son las instituciones bancarias, entre ellas: 

• Bancos comerciales 
• Bancos de desarrollo

También puedes recurrir a entidades financieras no bancarias, como cooperativas, entidades financieras o servicios financieros tecnológicos (fintech).

Aunque en los sistemas financieros de los países de la región existen múltiples instituciones bancarias, considera que si apenas vas a iniciar tu negocio es probable que sea más difícil conseguir recursos de este tipo de entidades, debido a la falta de historial crediticio.

Si es tu caso, otra opción puede ser el capital privado. Considera entre estas fuentes sobre todo a amigos y familiares e inversionistas ángeles. 

Si tu empresa está en fase de crecimiento puedes explorar opciones como capital de riesgo (venture capital) e inversionistas estratégicos.

Ten en cuenta que el capital privado buscará el retorno de su inversión, por lo que apostarán a empresas con alto potencial de crecimiento y con un modelo de negocio comprobado. Además, cada fuente de capital privado tiene sus propios criterios para medir el retorno de su inversión. 

Antes de emprender la búsqueda de recursos, te recomendamos hacer un mapa de evaluación de las posibles fuentes de financiamiento, conocer los requisitos de cada una, sus gastos asociados y qué buscan. Esto te ayudará no sólo a identificar cuáles se adaptan mejor al perfil de tu negocio, sino también a ajustar tu mensaje al aproximarte a cada una de ellas.

Un listado amplio de opciones de financiamiento para PyMES y recursos que te ayudarán en tu búsqueda está disponible en esta guía que hemos elaborado en ConnectAmericas.

Oportunidades en la región

Dado que para las empresarias hay una barrera invisible, basada en sesgos de género, que puede limitar sus posibilidades de acceder a entidades financiadoras tradicionales, es importante conocer todas las opciones disponibles, pero sobre todo aprovechar aquellas enfocadas o especializadas en apoyar proyectos liderados por mujeres.

Por ejemplo, el Centro Regional de Promoción de la MiPyME (Cenpromype) cuenta con distintos programas de soluciones financieras enfocados en mujeres empresarias de la región de Centroamérica. Conócelos aquí.

En el Caribe, la agencia regional de promoción del comercio Caribbean Export ofrece soluciones de financiamiento para empresas de la región y en 2018 lanzó el programa We-Xport, para apoyar a las empresarias caribeñas en sus procesos de exportación.

En países como México existen varias opciones, como el Programa de Formación para Mujeres Emprendedoras de la Asociación de Emprendedores de México y el programa Crezcamos Juntas de Nacional Financiera, una institución de banca de desarrollo.

El gobierno federal mexicano también cuenta con un programa enfocado en las MiPyMES lideradas por mujeres llamado Mujeres PyME, mientras que a nivel local varios estados tienen proyectos similares, como este en la capital del país.

Chile también cuenta con programas de financiamiento enfocados en mujeres empresarias, como el CreceMujer de su banca estatal o Capital Abeja Emprende que apoya a mujeres que quieran emprender su negocio. También existe el Fondo Esperanza, que apoya con microfinanciamientos para emprendimientos.  

En Ecuador puedes encontrar el programa SER de Banco Pichincha, mientras que Colombia cuenta con diversos programas, como el Fondo Mujer Emprende, Núcleo E Fondo Mujer Emprende y Mujeres Empresarias-Fondo Mujer Emprende.

Si quieres conocer qué otras opciones existen en tu país, te sugerimos usar la herramienta Financiate. Es un buscador en la plataforma de ConnectAmericas, que contiene información agregada por país de los bancos que ofrecen créditos para PyMES, así como los distintos servicios financieros disponibles.

Para sus miembros, ConnectAmericas ofrece además de un listado completo de bancos asociados por país, información para internacionalizar tu negocio según el sector en que te desempeñes y un sistema para enviar directamente los requerimientos de tu empresa a los bancos asociados. Puedes abrir tu cuenta aquí, es fácil, rápido y sin costo.

Sin importar la fuente a la que quieras recurrir en busca de recursos para tu negocio, antes de emprender tu búsqueda es fundamental estar preparada para llamar la atención de tus potenciales financiadores.

¿Cómo prepararse?

1. En primer lugar, lleva a cabo una revisión interna de tu negocio. Este proceso puede tomarte entre tres y nueve meses. Recuerda que el tiempo que dediques a esa revisión interna también es una inversión en tu empresa y mejorará tus posibilidades de conseguir el financiamiento que buscas. Apresurar tu búsqueda sin la debida preparación puede jugarte en contra de conseguir tu objetivo.
2. Verifica que cumples con las características deseadas por tu potencial financiador. Eso no significa que tengas que modificar la visión y objetivos de tu negocio. Más bien se trata de estar consciente de que cualquier persona o entidad que piense invertir en tu empresa tiene sus propias expectativas y objetivos de las empresas a las que desea apoyar. Pregúntate cómo puedes adaptar tu propuesta al perfil de ese posible inversionista, a partir de las características que busca.
3. Por último, pero de ninguna manera menos importante, prepara la presentación de tu pitch deck o resumen ejecutivo. 

Ten en cuenta que es en esta última etapa donde muchas propuestas se caen, por lo que es importante dedicar el tiempo suficiente a preparar el material de presentación para tus posibles inversionistas es fundamental. También recuerda adaptarlo a medios digitales. 

¿Qué debe incluir?

• Resumen ejecutivo: consta de máximo dos páginas, con aspectos clave y sin incluir información confidencial.
• Pitch deck: desarróllalo en formato de presentación y con una extensión de no más de 40 páginas.
• Flujo de caja proyectado: hojas de cálculo que detallen tu plan de negocio.
• Estados financieros: inclúyelos en caso de que cuentes con ellos.
• También puedes incluir un demo de tu producto o servicio o una presentación en video o multimedia. Considera esto como un plus que das para proyectar tu empresa. Mira nuestro curso en "Plan de Negocio en 7 pasos" para guiarte.

Atención a los términos y condiciones

Otro aspecto importante a tener en cuenta son los términos y condiciones. Aunque esta etapa de una negociación suele ser llevada por los abogados de cada empresa, es importante que te involucres en el detalle.

¿Qué quiere decir eso?

En toda potencial inversión existen documentos legales que se discuten y negocian entre el posible financiador o inversor y la dueña de la empresa, en este caso tú. Algunos son previos a la transacción, como la carta de intención, la carta de términos o el acuerdo de confidencialidad, y otros son posteriores, entre ellos los acuerdos de deuda, los acuerdos de transferencia de acciones o activos y las actas de asamblea.

Puedes conocer qué otros documentos existen en cada etapa en este listado, pero queremos enfatizar la carta de términos, ya que el proceso de negociación de este documento definirá las condiciones y los aspectos clave de la relación que a partir de ese momento establecerás con tu inversor.

Es fundamental que prestes atención detallada a este proceso, aún si cuentas con asesoría legal. Recuerda que el objetivo de negociar los términos es encontrar un punto medio entre lo que quiere el inversionista (recibir lo que espera, recuperar su inversión, evitar contingencias) y lo que tú quieres (certidumbre en la transacción, evitar riesgos adicionales a la inversión, libertad de acción).

Puedes conocer más del proceso de preparación para la búsqueda de financiamiento en la Aceleradora Virtual LEADS Mujer, en donde también conocerás estrategias de crecimiento, de ventas, marketplace y gestión de talento, entre otros temas útiles. 

También considera que es un proceso que toma tiempo y no siempre es un camino directo ni que resulta a la primera. Recuerda tener paciencia y no perder el foco de tu objetivo al buscarlo.