Tarde o temprano un emprendedor llegará a tener que decidir qué nombre le pondrá a su empresa. Y aunque pareciera una tarea simple, es necesario dedicarle el tiempo suficiente para encontrar el nombre perfecto, que muchas veces puede llevar al éxito o al fracaso del negocio.
Hay que tener presente que el nombre de una empresa será la tarjeta de presentación y la primera imagen que uno quiere transmitir a los clientes. Además, ese nombre se supone que trascenderá en el tiempo hasta que la empresa se convierta en una gran compañía, que es el deseo natural y factible de todo emprendedor.
Síguenos en